Nuevas aventuras

Mañana parto al país del norte, al Perú. Vamos con 2 amigos a conocer Machu Picchu, el Cusco (uno de los tantos ombligos del mundo) y lo que alcance. Así que nada, me deseo suerte a mi mismo en esta nueva aventura que traerá nuevas fuentes de inspiración.

Regresaré…

Películas de inicio de año

En lo que llevo del fin de semana he visto ya 2 películas, la primera en el cine y la segunda en DVD.

1. El Día que la Tierra se detuvo (The Day the Earth Stood Still): Es la típica película del estilo "Día de la Independencia" con OVNIs y extraterrestres. El problema es que sufre el mismo fenómeno que otra película que vi el año pasado que es "El Fin De Los Tiempos". Es como si el guíon lo hubiese empezado una persona y el final lo hubiese escrito otra. Por ejemplo, es como si un tipo adrenalínico, un hombre de acción, así como un James Bond hubiera empezado la película y después se transforma en HELLO KITTY. Desgraciadamente eso hace que todo lo bueno que uno vio antes se borre y salga echando puteadas del cine… Entre las cosas más notables cabe destacar el robot gigante perturbador y el niño amermelado y odiable (todas sus intervenciones me pusieron de mal humor) . La Ministra de Defensa también era una vieja detestable. Lo mejor fue la siempre hermosa Jennifer Connelly, el amor de mi vida (no tanto, pero me hizo sufrir toda la película por su inalcanzabilidad).

2. Lakeview Terrace: Muy entrenida. En realidad no hay mucho que decir o contar. Es la típica película de las cosas no son como parecen. Una joven pareja se muda a un barrio nuevo y empiezan a tener roces con su vecino policía. Típica película de malos vecinos, pero no deja de ser entrenida y uno se va metiendo más en el asunto.

El verdadero Año Nuevo

Hoy es año nuevo. En realidad nunca le había encontrado mucha gracia a la cuestión, como que había tenido por lo general años nuevos medios funados. Salvo por el del 2003 que fue en Berlín, hace ya tiempo y del que ya hablé en una entrada pasada. De todas maneral el que vivimos ayer/hoy fue buenísimo, porque fue la primera vez que lo pasé en Valparaíso en el Cerro Barón. Fue grosso poder disfrutar con toda la gente y tener una vista privilegiada de los casi 30 minutos de fuegos artificiales. Desgraciadamente no pudimos encontrar una buena fiesta (y a precio módico) pasado las 2 de la mañana y al final todo funó y volvimos derrotados a Santiago. Pero de todas maneras lo vivido y tomado en el cerro valió la pena y ojalá se vuelva a repetir. Compartir con la gente en la calle, los amigos y el copete, todos juntos olvidando los problemas, las crisis económicas, aunque sea al menos 1 vez al año no tiene precio.

Muchas gracias al Go, Yaz y Albert, nos vemos para el 2010.