Biografía Megadeth

Hace mucho, mucho tiempo publicaron una biografía hecha por mí de Megadeth en el sitio Ciudad Metalera. Aquí la subo más que nada porque ya no está en el sitio, y como entretención. Aproveché de actualizarla hasta la fecha, antes se encontraba solamente hasta el año 2004.

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Megadeth fue una de las cuatro bandas que lideraron el thrash norteamercano de los '80 junto a Metallica, Anthrax y Slayer. Sus inicios se remontan a 1983, cuando el guitarrista Dave Mustaine es expulsado de Metallica por sus diferencias con Lars Ulrich y James Hetfield, principalmente por sus problemas con el alcohol y drogas. Con odio y sed de venganza, Mustaine decide seguir adelante y demostrar que él podría tener una banda mucho mejor que la de sus antiguos compañeros. Por haber sido un ex-miembro de Metallica, Mustaine y su banda estarían condenados a ser comparados con la banda de los jinetes del Thrash, incluso hasta el día de hoy, aunque en menor grado.

Dave pronto conocería a un tranquilo bajista de nombre David Ellefson, quién se adaptaría con facilidad a la difícil personalidad del guitarrista. A causa de la dificultad para encontrar miembros estables (hasta Kerry King de Slayer estuvo un tiempo en la banda), Dave decide tomar el micrófono y ser el vocalista de su banda.
Ya en 1984, la banda de Mustaine llamada Megadeth (proveniente de un término que leyó en las noticias – Megadeath - Megamuerte - 1 millón de muertes) contrata dos nuevos miembros, ambos provenientes de una banda de jazz, Gar Samuelson en la batería y Chris Poland como guitarrista líder. A finales del mismo año, Megadeth consigue un contrato con Combat Records y en 1985 se da el nacimiento de su placa debut: "Killing Is My Business... And Business Is Good!". Este disco se destacaría por su oscuridad, crudeza y su enorme parecido en cuanto a estilo con el primer LP de Metallica, "Kill 'Em All". Sin embargo, la producción fue bastante pobre, puesto que la banda se gastó la mitad del dinero en drogas, y por esto, se decidió despedir al productor original para bajar los costos de la producción.
Del debut destacan “Mechanix” (la versión original de “The Four Horsemen” de Metallica), “Last Rites / Loved To Deth” y el cover de Nancy Sinatra, “These Boots”.

En Noviembre de 1986, Megadeth lanzaría su segundo disco, "Peace Sells... but Who's Buying?", un trabajo mucho más maduro que el anterior, donde Megadeth además de añadir ocultismo y muerte en sus letras, se encargaría de expresar sus primeros manifiestos políticos, como se muestra en la portada del álbum (aquí aparece por primera vez, de cuerpo completo, la mascota de Megadeth, el calavérico Vic Rattlehead) y en la canción que le da su nombre. Fue con este disco, con el cual Dave y sus amigos se hicieron famosos dentro de la escena metalera, gracias al uso de videoclips, obteniendo así su primer disco de platino. También la banda firmaría un nuevo contrato con Capitol Records, reeditándose "Peace Sells..." bajo este sello. A finales de año, Dave despide a la dupla Gar Samuelson y Chris Poland (en especial a este último, quien habría vendido las guitarras de Mustaine para comprar droga).

En Marzo de 1988, Megadeth regresa con "So Far, So Good... So What!". Este trabajo cuenta con la participación de Chuck Behler en la batería y Jeff Young como guitarrista. Aquí podemos encontrar temas como el cover de los Sex Pistols, "Anarchy In The UK", y el íntimo "In My Darkest Hour", tema que fue dedicado a Cliff Burton, ex-bajista de Metallica que murió en un trágico accidente en 1986. Este trabajo tomaría una línea más simple y visceral que la exhibida en la segunda placa y la producción también es damnificada por los problemas personales dentro de la agrupación. Al finalizar el tour promocional del disco, Mustaine expulsa a Young y Behler, dejando en la batería al técnico de Chuck, Nick Menza.
A finales de 1989, "Dave Junior" Ellefson se interna en un centro de rehabilitación de drogas junto a Dave Mustaine. Ellefson quedaría limpio desde entonces, pero Dave volvería más tarde con sus vicios que iban de mal en peor.

A principios de los '90, Megadeth graba un cover de Alice Cooper, "No More Mr. Nice Guy" para el soundtrack de una película llamada Shocker. Esta sería la única grabación de Megadeth como trío, con Mustaine haciendo las voces y la guitarra líder. Para Febrero se incorpora a la banda el virtuoso guitarrista de Speed Metal, Marty Friedman, quién había trabajado junto a Jason Becker en Cacophony. Esta nueva formación se consolidó como la más clásica y duradera en la historia de la agrupación. En Octubre sale a la luz el disco más notable y musicalmente maduro de la historia de la banda, "Rust In Peace". Destacan el himno anti-bélico “Holy Wars… The Punishment Due” y la semi-instrumental “Hangar 18”.

Tras participar en bandas sonoras de películas, con temas como “Breakpoint” y “Go To Hell”, y en las giras promocionales, Megadeth lanza su quinta superproducción en 1992, "Countdown To Extinction", el cual resultó ser todo un éxito comercial, debido a que la mayoría de las canciones estaban especialmente hechas para la radiodifusión, con estructuras más simples, pero fieles a sus raíces y sin perder calidad musical. Destacan cortes como “Symphony Of Destruction”, el nuevo himno de la banda, y “Sweating Bullets”, entre otros. El disco debutó en el segundo lugar de los ranking Billboard, pero no pudo superar la vara impuesta por el comercial álbum homónimo de Metallica (debutó en primer lugar y se ha mantenido vigente comercialmente). Este hecho hizo que Dave emocionalmente cayera muy bajo, llegando a la frustración. En ese año, también tuvo a su primer hijo, Justis, lo cual hizo que tuviera que enderezar su vida de alguna manera. Sin embargo, al año siguiente, Dave fue encontrado inconsciente, en uno de los camiones del tour, con sobredosis de Valium (un tipo de calmante). Mustaine tuvo una muerte clínica, pero fue revivido, quedando en estado de coma por ocho días.

Rehabilitado nuevamente, Dave y su pandilla vuelven a la carga con "Youthanasia" (1994), el disco conocido por tener bebés colgando en un cordel para secar ropa (carátula que fue censurada en Malasia). Este disco presentaba cortes bastante más melódicos que los que ya habían empezado a aparecer por la época del "Countdown To Extinction" y de alguna manera desapareció la complejidad en la estructura de los temas, creando la banda temas más simples. También se incluyó una de las primeras baladas de Megadeth, "A Tout Le Monde" y el excelente single "Train Of Consequenses". Cabe destacar que en las dedicatorias de la libreta del álbum aparece Dios, dándose a conocer así una nuevo cambio en la vida de Mustaine. La gira de este disco marcaría la primera visita en Santiago de Chile, repitiéndose el plato el año siguiente.

En 1995, se editaría el LP "Hidden Treasures", que trae 7 temas aparecidos en distintos soundtracks, como "Angry Again" o "99 Ways To Die", más uno inédito. Por esta época es cuando Dave se rehabilita por 15º vez, saliendo por fin airoso y dejando atrás momentos difíciles. Después de muchas giras y de un descanso, la banda se enfoca en lo que sería su séptimo disco de estudio, "Cryptic Writings" (1997). Este disco también fue hecho especialmente para la radiodifusión, con una producción excelente, balance entre riffs potentes, melodías y coros pegajosos, con un Dave que mejoró su calidad vocal y Marty Friedman teniendo un mayor protagonismo a la hora de los solos. Canciones como “Trust”, "Almost Honest” y “She-Wolf” se volvieron obligatorias en los conciertos.
Durante el tour del "Cryptic Writings", en 1998, Nick Menza sale de la banda para operarse debido a un quiste en la rodilla. Esto significó la oportunidad perfecta para que se alejara de la banda, puesto que las relaciones entre Nick y los demás estaban muy deterioradas, tanto en lo personal como en lo musical. Así fue como Megadeth tuvo su primera baja dentro de ocho años. Jimmy DeGrasso (ex-Suicidal Tendencies, White Lion, Alice Cooper), un conocido de Dave, fue escogido como el nuevo batero y tendría la oportunidad de conocer Santiago en la gira mundial. DeGrasso ya había trabajado con Dave Mustaine en un pequeño proyecto paralelo llamado MD.45, del cual el único disco que se editó fue "The Craving".

"Risk", fue la placa que siguió a "Cryptic Writings" en 1999. Si algunos pensaban que la banda ya se estaba vendiendo, este sin duda fue el disco que reafirmó esto y dividió a gran parte de los fans. Este disco presentaba una faceta mucho más "light" que el disco anterior, lo cual se debía principalmente a un riesgo que tomó Dave, por parte de un comentario de Lars Ulrich, quién decía que Mustaine y su banda debían tomar un riesgo (RISK, de ahí viene el nombre de la placa) a la hora de hacer música (¡y miren quién habla!). Temas como “I’ll Be There” y “Crush 'Em” reafirmaron esta nueva postura. Ese mismo año, el ex-batero Gar Samuelson, fallecería por complicaciones hepáticas. La agrupación le rendiría un pequeño tributo dedicándole el tema "Peace Sells" durante su actuación en Woodstock, debido a que se enteraron ese mismo día del fallecimiento de su ex-compañero.
Para peor, siguiendo el hasta ese entonces axioma de Megadeth (si se va el baterista, el guitarrista también y viceversa), Marty Friedman abandona a principios del 2000 en plena gira. El talentoso guitarrista se sentía disconforme con el sonido que estaba tomando la banda, con el género metal y quería seguir su propio camino (esto de alguna manera se nota en sus trabajos solistas paralelos a Megadeth). De esta forma, Al Pitrielli (ex-Savatage, Alice Cooper, Great White) se encarga de ocupar el puesto dejado por Marty en pleno tour. Durante el tour del 2000, Megadeth dio a conocer en vivo dos nuevos temas, "Kill The King" y "Return To Hangar" (una especie de continuación de "Hangar 18"), temas que seguían en parte la línea del "Countdown To Extinction" y que dieron expectativas de que la banda volvería a sus raíces.

Megadeth anunció su 9º disco de estudio para Capitol Records, pero Dave y sus amigos abandonan el sello, haciendo que este último disco sea un "Grandes Éxitos",titulándose "Capitol Punishment: The Megadeth Years". En este disco se incluyó "Kill The King" y otro tema nuevo: "Dread & The Fugitive Mind". Ambas canciones hicieron crecer las expectativas de una posible continuación del "Rust In Peace ", álbum tan aclamado y querido por los fans, él cual ya anunciaba el retorno de un viejo conocido, el siniestro Vic Rattlehead en la carátula.
Así fue como Megadeth firmó un contrato con Sanctuary Records (el sello de Rod Smallwood, el manager de Iron Maiden) y se preparó para editar su nuevo disco de estudio. En Mayo del 2001, salió al mercado "The World Needs A Hero", el nuevo disco. Sin embargo, este disco no fue "una continuación del Rust In Peace". Presentaba un sonido diferente, más pesado y empalagoso que el disco anterior, intentando sonar como antes, pero terminando un poco repetitivo y con menos fuerza que antes. A pesar de todo, se aprovechó el momento para lanzar un también DVD del programa VH1, "Behind The Music" con la historia documentada de Mustaine y sus muchachos, más lo que no se vio en la emisión original.

En plena gira del mismo año, Megadeth había prometido grabar un álbum en vivo en Argentina, teniendo agendada presentaciones en Noviembre, pero debido a los infames atentados del 11 de Septiembre, la banda decidió no salir del país, producto del pánico generalizado y terminaron registrando el disco en Arizona, USA (hogar de Mustaine en esa época).

Para el 2002, Dave y el productor Bill Kennedy se dieron el trabajo de remasterizar el primer trabajo de la banda ("Killing Is My Business... And Business Is Good!") bajo el sello Loud Records. El cambio del disco fue notable, donde se incluyó el artwork original y con un sonido más limpio y fresco. Lastimosamente, el autor de “These Boots” (Lee Hazelwood) no permitió las letras insolentes de la versión de su canción y se le agregaron “beeps” a las palabrotas del colorín cantante.

En Marzo se editó el CD y DVD, en vivo llamado "Rude Awakening", grabado en los últimos 2 shows en que tocaría Megadeth. Así se pensó en su momento, porque lastimosamente, el 4 de abril un comunicado en la página oficial de la banda, nos sorprendería al decir que Dave Mustaine había "abandonado la banda". El cantante habría sufrido un severo daño en los nervios de su mano izquierda, diagnosticándosele una "Neuropatía Radial". No era certera una cura total de su mano, así que Mustaine decidió disolver el grupo, para ocuparse de su rehabilitación y también pasar más tiempo con su familia. Tan drástica fue su decisión, que empezó a rematar y regalar su enorme colección de guitarras Jackson. En tanto, Al Pitrielli regresó a Savatage, siendo expulsado Jack Frost, el guitarrista que lo estaba reemplazando. DeGrasso siguió su camino y "Junior" Ellefson formaría su propio proyecto (F5)

En Septiembre del año 2002, para "conmemorar" el fin de la banda, Sanctuary lanza al mercado "Still, Alive…And Well?", un epitafio bastante pobre, puesto que sólo se incluyen los trabajos de Megadeth para Sanctuary: la mitad del disco son canciones en vivo (lo que quedó fuera del Rude Awakening) y la otra mitad es son cortes del "The World Needs A Hero".

En el año 2003 se dio a conocer la noticia de que Mustaine había hecho un nuevo contrato con guitarras ESP, presentando su propio modelo, cosa que dio indicios de que su mano estaba curada. A finales de ese año, Dave reafirmó este hecho y presentó la versión DVD de “Peace Sells… but Who’s Buying”.

Pero recién a principios del 2004, se dieron a conocer nuevas e importantes noticias: ¡Megadeth había regresado! Dave Mustaine estaba 100% curado y había aprendido a tocar guitarra de nuevo. Incluso explicó que su problema apareció por haberse quedado dormido en mala posición. El colorado guitarrista habría tratado de reunir a la formación clásica (Mustaine-Ellefson-Friedman-Menza), pero Marty se negó a colaborar y los otros dos músicos estaban ocupados en otros proyectos. A pesar de esto, Dave logró incluir a Chris Poland en su nuevo trabajo y a los músicos de sesión Vinnie Colaiuta (batería) y Jimmy Sloas (bajo). Por si fuera poco, se anunció la remasterización de los discos de Megadeth para Capitol Records.
Así, "The System Has Failed" vio la luz en septiembre de ese mismo año. Con el paso del tiempo, el mismo Mustaine daría a conocer que iba a ser su primer álbum solista, pero por obligacion con el sello debió ser rotulado estrictamente como Megadeth. En realidad no sería gran problema, puesto que el sonido se asemejaría al de los discos de los noventa y a la línea impuesta por los temas inéditos del "Capitol Punishment", un metal más melódico y directo que el thrash de los primeros discos. Ejemplos claros del disco serían "Kick The Chair" y "Blackmail The Universe".

Para aprovechar la situación y promocionar el disco alrededor del globo, Dave se embarca en una gira mundial con nuevos músicos, ahora si terminando con la ilusión de reunir a viejos músicos. Se unirían James MacDonough (bajo, ex-Iced Earth) y los hermanos Shawn (batería) y Glen Drover (guitarra), ambos provenientes de un grupo canadiense llamado Eidolon. Cabe destacar que Nick Menza intentó retomar las baquetas, pero fue bajado de la gira unos días antes por no estar "físicamente apto" para aprontar la tarea de volver a los conciertos. A todo esto se suma el plan de Mustaine para crear el Gigantour: un festival al estilo Ozzfest, con la intención de sumar bandas y aumentar la promoción del heavy metal en USA.

En octubre del 2005, Megadeth retorna en gloria y majestad a tierras sudamericanas. Además de tocar a recinto lleno en el Court Central del Estadio Nacional acá en Santiago, la banda aprovecha de cumplir una vieja promesa: Grabar un disco en vivo en Buenos Aires. Esa misma noche Dave en la mitad del recital aprovecha de declarar a sus seguidores que la banda seguiría adelante, tras pasar los últimos meses insinuando que estaba pensando en cerrar el capítulo Megadeth de su vida, además de dedicarles temas personales al "país de sus amores" ("I'll be There" y "Coming Home"). Todos esos momentos, quedan plasmados en "That One Night: Live In Buenos Aires", editado recién casi un año y medio después, en formatos DVD y CD. Dicho registro, sería el único de Megadeth con el aporte del bajista MacDonough, debido a que sería reemplazado a principios del 2006 por James LoMenzo (ex-White Lion y Black Label Society).

Toda esta "megaresurreción" sería aprovechada por el antiguo sello discográfico, Capitol Records, sumando a la discografía "Greatest Hits: Back To The Start" (2005) y "The Arsenal Of Megadeth" (2006). Este último sería un DVD antológico con videoclips y material inédito, en cambio, el primero es una recopilación de temas votados "on-line" en el foro oficial (aunque en rigor serían casi los mismos que el compilado pasado). La versión deluxe incluye un DVD en vivo de la época del "Risk".

El año 2007 no se alejaría de nuevos lanzamientos, además del ya nombrado registro en vivo. A principios de año Mustaine se hace auspiciar por guitarras Dean. En mayo debuta el undécimo título de estudio, "United Abominations", ahora bajo el alero de Roadrunner Records. Entre los cortes del disco, destacan "Washington Is Next!", "Sleepwalker" (que siguen la tendencia melódica mostrada en el disco anterior), y la re-grabada "A Tout Le Monde (Set Me Free)", el primer dueto en la historia de la agrupación, con el aporte de Cristina Scabbia de Lacuna Coil. A la promoción del disco se le sumaría su respectivo tour (y nueva versión del Gigantour), y la aparición de "Warchest" a finales de ese año, un megacompilado de 4 CDs y 1 DVD con material clásico, cortes en vivo y rarezas. Sólo para "Drooguies", como suele llamar Mustaine a sus seguidores.

En este año Megadeth partió haciendo noticia, puesto que Glen Drover dejaría el grupo para estar más tiempo con su familia y así darle el paso a Cris Broderick (Jag Panzer, Nevermore). Dave y sus amigos visitarían nuevamente tierras sudamericanas en mayo/junio, ahora pasando por el "Arena Santiago", también llenándolo al tope de su capacidad (9000 personas aproximadamente, casi el doble del Court Central).

Mustaine no se detiene. Tras un casi final abrupto en su carrera como músico, regresa a la senda del rock/metal, aunque ahora sin la compañía de sus antiguos escuderos y con otras convicciones. Si bien, hablar de Megadeth es casi hablar de Dave Mustaine, lo de el colorín guitarrista da para otra historia. Ahora la agrupación se va adentrar en una nueva aventura discográfica, que seguramente se podrá adquirir ya el año que viene y de paso, el siempre oportunista Capitol Records lanzará una nueva antología de disco doble, "Anthology: Set The World Afire". Es así como Megadeth vuelve de la muerte misma, para continuar más vivo que nunca en lo que es la vida misma: el rock (o metal).

Gengar99.-

Eurotour (6.2)

Día 6 (01-01-03): “Año nuevo II”

Intermezzo.

Alrededor de las 15 horas nos tocaron la puerta. Era la Sra. Lisiuk invitándonos a comer. Estaba toda la familia, menos Wolfgang, quien seguramente estaba con su novia. El almuerzo estaba muy bueno, con brindis y todo. Tras la comida, fuimos a caer al albergue a ver si había alguien. Pero no había nadie.
Nos quedamos abajo en algo así como un lobby esperando a que llegaran pero nada pasaba. Me dio sed y decidí comprarme una bebida de máquina. Me salió una en botella en vez de lata. Al terminarla, no sabía que hacer con ella, no había basureros cerca. La llevé a la recepción y le pregunté al tipo dónde la podía botar. El sujeto me la recibió y sacó de la caja 25 centavos para mí. Le di las gracias y me sorprendí por lo “freak” de la transacción. Más tarde sabría la verdad: el “Pfand zurück”.
Durante todo este momento con mi amigo Peich observábamos un grupo de gente que conversaba amenamente. A la cabecera estaba un sujeto de rasgos medios soviéticos, al que se le notaba que el alcohol se le había subido a la cabeza. Pero eso no superó el momento diabólico del día. En las escaleras había un grupo de gente con rasgos medios enfermitos, que miraban como el soviético se hacía el interesante. Pero en eso, desde arriba se comienzan a sentir unos gritos desgarradores: ¡Mensch! ¡Aaaaargh! ¡Yaaaaaa!
A medida que la potencia de los gritos aumentaban, se sentían zancadas bajando los escalones. Me imaginé cualquier cosa menos lo que vi, pensé incluso en un nazi de 1,90 sacado de un campo de concentración, además de que no vimos ninguno en año nuevo. Pero no. Resultó ser una vieja chica con cara de hombre y un potente vozarrón, escoltada por un grupo de gente. Y seguía: ¡Mensch! ¡Nyaaaa! ¡Daaaaa!
Fue brutal. Por eso decidimos optar por lo sano y al rato fuimos con Peich a dar una vuelta. Al rato regresamos y subimos. Estaban las chicas del B. Les convidamos un poco de los berlines que nos habían dado para el año nuevo en la casa. Al momento regresó el resto y Vilaboa fue a preparar su maleta porque se iba en la noche a París.
Antes de salir, nos dividimos en 2 grupos: las niñas Maru, Cata, Karin y Katherine volvieron al pub a buscar la famosa chaqueta. Cuando le comentamos sobre este hecho a la Sra. Ana María, ella ofreció uno de los abrigos del closet. Pero le dijimos que no sabíamos si íbamos a volver a ver a esta chiquilla.
Con Wilhelm, Benja, Vila, y los demás fuimos al famoso Hard Rock Café. Antes de salir, me tomé un Red Bull, ja ja. El trayecto estuvo algo accidentado, puesto que con el frío de ayer, las calles estaban congeladas y por ende, resbalosas. Afortunadamente no me caí. El local era espectacular, con muchas cosas para mirar. Estaba lleno de guitarras colgando en la pared. Había una de Metallica también. Me dio risa una foto de Pantera en su época más fleta. Vimos el menú y todo estaba visceralmente caro. Afortunadamente nuestro amigo Peich había encontrado 10 € botados en el camino. Con eso pedimos unos Spring Rolls y también con unos centavitos del bolsillo pedimos un vaso chico de cerveza para todos. Alguien sacó un par de fotos y nos fuimos. Recuerdo un grupo de amigos que comía brutalmente al lado nuestro, les debió haber salido carísimo. Javier se compró una polera del Hard Rock Café. Después volvimos al albergue a buscar el equipaje de Vilaboa y de ahí a la estación. Mientras nos despedíamos de nuestro amigo, Carole y Chofa miraban morbosamente como un par de homosexuales se despedían cariñosamente.

Tras la salida del tren, bajamos a comprar el boleto de Cervatín, quien nos iba a acompañar a Praga. Le compramos uno para las 15:35 (nosotros usábamos el ticket mágico de varios de días). Después Carole y Chofa se quedaron muchísimo rato hablando con la empleada de informaciones. De ahí salió la expresión: “Se quedaron jugando Magic (The Gathering, el juego de cartas)”.
Finalmente terminaron y emprendimos camino a casa. Hasta que nos encontramos con un cybercafé que se veía barato. La hora costaba 0,65 eutos, pero uno podía hacerse un ticket de más o menos dinero. Benjita metió una moneda de 2 euros y se metió a un PC: Aprovechando, me hice un ticket de medio euro. Aproveché de escribir, puesto que la conexión en el departamento era demasiada cara (se conectaban por módem). Me terminaron apurando, porque escribía de lo lindo y querían irse. En el metro, ocurrió lo peor de la vida y me enseñó una gran lección.
Quedaba 1 minuto para la llegada del próximo metrotren, cuando las chicas se percataron de que habían olvidado los folletos que les habían pasado en la estación de trenes. Dijeron que nos fuéramos igual, pero a ellas les daba “plancha” volver de nuevo. Pero por el solo hecho de ser mujeres, solas, y en un país extraño, teníamos la obligación moral por así decirlo, de no dejarlas. En el cybercafé no estaban las hojas estúpidas. De hecho las encontramos tiradas en la calle, bajo unas mesas y mojadas más encima, puesto que empezó a llover fuerte.
Cuando volvimos a la estación nos dimos cuenta de algo: Ya no pasaban trenes. Nada podía ser peor. Me enojé mucho con estas cabras, pero me guardé el odio para adentro. Tenían la culpa, pero no se merecían ninguna clase de reto en realidad. El regreso fue infernal.
Benjamín se sentía medio enfermo y las chiquillas caminaban muy lento. Afortunadamente se me quitó un poco la ira en ese momento porque como iban más atrás me pudieron avisar cuando se me cayó un guante.
Pero lo peor, fue que nos mojamos mucho, demasiado. Las chiquillas llegaron a tener agua en las zapatillas (Menos mal mis zapatos eran impermeables y en ningún momento sentí frío en los pies, en cambio la parca igual se pasó un poco el agua).
Caminamos, caminamos y caminamos. En una parte doblamos y caminamos harto. En ese momento sentí que algo estaba mal. Nos detuvimos en un paradero de bus y miramos el mapa ¡En el momento que doblamos fue en la dirección contraria! Fue fatal. Las chicas ya no podían caminar más por el frío y el cansancio. Incluso querían pedir un taxi, pero eso salía un ojo de la cara. Con Benjamín le preguntamos a un solitario hombre que esperaba un bus si viajaban buses a esta hora a Kurfürstenstraße y dijo que sí. Mientras discutimos sobre qué hacer, Benjita dijo: “El bus viaja cada 30 minutos.”
En eso, el tipo del paradero dijo: “20 minutos (en castellano).”
Fue como ¡plop! Pero seguimos hablando entre nosotros. El tipo preguntó de nuevo en castellano: “¿Ustedes van a Kurfunsterstraße (sin pronunciar la “ü”)?”
Le respondimos que sí.
- Yo también voy a Kurfunsterstraße – siguiendo con su castellano demostrando que era latino, como nosotros.
- Si quieren yo los guío – dijo amablemente.
Resultó que era colombiano, notándose en su acento.
Al rato de discutir quedamos en que Carole, Chofa y Wilhelm se quedarían en el paradero con un extranjero desconocido, mientras que Javier, Benjamirri y yo nos haríamos el recorrido a pie.
Al final llegamos a Kurfünsterstraße solamente un minuto después que ellos. Menos mal, así nos ahorramos 2 euros. Nos despedimos del amable sudaca y con Cervatín corrimos al Burger King porque el hambre mataba. Pero malas noticias: Estaba cerrado.
Yo casi llego a gritar de rabia. No podía creer en tanta mala suerte junta. Enojado, regresé con mi amigo Javier a casa donde me comí la comida que la Sra. Lisiuk encantadoramente nos había dejado en la pieza y fui feliz.

«Nadie puede…»

Gurú / Robot perturbador

Cada cierto tiempo se me pegan cosas en la mente y no puedo dejar de "pensarlas". Como por ejemplo hace 2 días miré unos videos del autodenominado gurú Eduardo Bonvallet criticando al intocable Marcelo Bielsa por el partido Chile-Brasil. Más encima me pegó el termino "no existe".

Hace no mucho había visto en la casa de mi amigo YAZ un robot brutal, cuadrúpedo como un perro, que mantiene el equilibrio más que decentemente…

Es del terror, ojalá no termine matando seres humanos en Iraq o en cualquier parte del mundo…

El que ríe al último ríe mejor (2)… / Eurotour (6)

Ahora le tocó ganar a Chile en el partido contra Colombia, y por goleada. No hay que olvidar que se viene de otra goleada humillante, pero por suerte ahora nos tocó a nosotros. Hay que aprovechar el momento para reír no más… Gracias a los cabros por esta alegría.

Lo importante es que mañana (casi) todos van a amanecer más contentos… se puede.

(Matías volvió a llamar…)

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Día 6 (01-01-03): “Año nuevo”

Y comenzó el nuevo año. Después de saludar a los cabros con su respectivo abrazo, veía como Javier saludaba a un joven germano que nos observaba entusiasmado como celebran el año nuevo en Chile. Atrás había quedado el mito del atentado en Brandenburger Tor. Era más o menos así: Un sujeto habría encontrado una billetera con mucho dinero. Se la devolvió a su dueño, quien resultó ser un musulmán. Muy agradecido, le habría dicho al hombre: “¡Oh! Muchas gracias por el favor, dime que puedo hacer por ti.”
- Nada, yo sólo hacía lo que cualquiera hubiese hecho – contestó el caballero.
- Bueno, gracias igual. Por eso te doy un consejo: No vayas al Brandenburger Tor para el Año Nuevo.
Y volviendo con nuestra historia, era hora de irse. El show estuvo genial dentro de todo, pero los fuegos artificiales dejaron bastante que desear. En Chile son mucho mejores. Yo creo que los gringos se gastaron la mitad de los fuegos lanzándolos antes o payaseando con ellos. Los alemanes no eran tan perfectos después de todo.
Ahora nos íbamos a una fiesta latina que nos habíamos conseguido (costaba un ojo de la cara según recuerdo), donde también iba gente de Osorno. Antes de eso hubo que esperar a Mario quien buscaba a sus primos, los cuales nunca aparecieron. Seguimos caminando y estuvimos un rato bailando tecno europeo. Cuando nos queríamos ir tuvimos que ir a la otra estación, porque “Unter den Linden”, donde estaba toda esta fiesta, estaba cerrada. También rescatamos nuestros tragos, los cuales decidimos abrirlos a las 4:00 AM, hora en que empezaría el año nuevo en Chile. Después de andar harto en metro (hubo que tomar varias combinaciones) llegamos a la súper-fiesta. A la entrada estaban los típicos gorilas vigilando que nadie entre infiltrado. Adentro nos timbraron la mano y bajamos al “Keller” (sótano) a dejar los abrigos en custodia. Costaba 1 € la porquería. Ya abajo nos encontramos el hermano de Filósofo, quien anduvo la mayoría de su tiempo con sus nuevos amiguitos de Osorno. En el Keller estaba la fiesta en sí. Estaba la música fuerte y los sillones para poder hacer de las suyas. Aproveché de comer los restos de comida que había después bajé y me quedé un rato bailando. Recuerdo haber visto en los sillones a Ivy de lo lindo y algo más… Bueno, el que sabe, sabe.
Fui a pedir una cerveza (eran el item gratis en la promoción de bar abierto). La marca era “Becks”, pero era pésima y cuando la probé dije: Wecks! Hasta la infame cerveza Cristal era mejor. Además todavía estaba con asco, ya que había vomitado por primera vez con alcohol (y más encima con varios litros de cerveza) a mediados de noviembre.
A las 4 hora local empezó el año nuevo chileno. Me pasaron una champaña para abrirla. Era la primera vez que abría una, y al lograrlo finalmente, el chorro salió para cualquier parte, menos hacía adelante. Igual me maté de la risa porqué se mojó la Karin.
Ya más tarde subí y me quedé conversando con Mario. También estaba Peich, quien estaba anormalemente cansado, jo jo. En ese momento vimos a un ex-personaje del colegio: El Meier. Estaba igual que la última vez que lo vimos y supuestamente estaba en el intercambio con la gente de Osorno. Con Mario nos matábamos de la risa recordando las tallas en torno a su persona, como la del marsupial, mayita elasticada y Motoratones de Marte. Después subió Brillantín y se quedó profundamente dormido. Durante un rato bajamos con Mario al sótano y vimos a nuestras compañeras entrando en acción. Carole bailaba con un sujeto muy curioso que usaba gorro de tipo detective, los pantalones muy caídos y polera con la “S” de Superman. Chofa conversaba amenamente con un tipo que “se le tiraba al dulce”.
Mientras mirábamos ésto, no pude evitar oír lo que hablaban unos chiquillos de Osorno. Uno le ofrecía a otro “un trago que preparaban los españoles” y que tenía 70 grados. En ese momento pensé en el “Absinth”, un trago prohibido que es el sueño de mi compañero Suárez. Mientras hablábamos arriba, se nos acercó justamente uno de los tipos de Osorno que conversaba recién y nos preguntó si podía sentarse con nosotros. Ahí nos conversó un poco, y de hecho, nos comentó de su trago español y que supuestamente contenía Cannabis y por eso no quería probarlo, porque estaba en contra de la marihuana.
Durante unos momentos vimos a Carole paseándose con su nuevo amigo “Superman”. Muchos ya apostábamos a que algo podría suceder. De hecho, algunos supieron la verdad, yo no por si acaaso. En eso de las 5, cuando nos pusimos de acuerdo en irnos, la niña Carole había desaparecido… y Superman también. Recorrimos todo el local y ni una pista de estos dos tortolitos. Mientras buscábamos me acordé que había escuchado que había una pieza con cama secreta, incluso habían unas puertas misteriosas en el local. A eso de las 6 aparecen finalmente los fugitivos.Ya era hora de irse, la fiesta seguía, pero ya estaba funando pesado, no quedaba nada más por hacer, además casi no había ido gente aparte de nosotros y el grupo de Osorno. Fuimos a buscar nuestras pertenencias a custodias y cuando parecía que estaba todo listo para poder irse, pasó uno de los momentos tontos del día. La Maru había perdido su abrigo. Fue a reclamar a custodia, pero el gorilón se paró y se fue. En todo el trámite en que la niña fuera a hablar con algún encargado, perdimos otra hora más. Muchos estábamos apestadísimos, incluso Filósofo diciendo: “Que es tonta”, “Se lo merece”. Finalmente el famoso abrigo jamás se apareció, así que nos fuimos igual. Cabe destacar el frío asqueroso en el camino, eran fácil -15ºC. Fue tan doloroso que uno no podía casi hablar, producto de lo paralizante del frío mismo. Nos despedimos de Mario que se iba por otro camino y a quien seguramente no vería hasta marzo. Nos fuimos todos junto a la niña Ivy, quien finalmente despertó. Algunos quedaron enfermamente en juntarse a las 10:30 para visitar algún museo, pero con Javier no estábamos ni ahí en dormir 2 o 3 horas. De hecho llegamos a las 8 AM a la casa. Cuando fui al baño, hice el menor ruido posible. Mi amigo me dijo después: “Bien, te convertiste en un Ninja.”

Continuará…

El que ríe al último ríe mejor…

Ayer Brasil arrolló a la Selección Chilena 0-3 en el Estadio Nacional. No me voy a ir en la lata de esos análisis técnicos y todo lo que implica, sólo una idea clarísima: Tanto se habló de que Brasil no estaba en su mejor momento, pero aún así por historia y nombre la mayoría de las veces ganan (y goleando). La gente en general daba el partido por ganado, incluso con goleada y asegurando que Chile le iba a poner la lápida al técnico Dunga. Portadas, reportajes, brujos faranduleros y comerciales mofándose del "Scratch" abundaron los días previos al partido. Hasta se intentó crear una versión animada de la Roja para acercar a los niños a la selección.

Y finalmente todo terminó en una humillación, más algunos errores puntales del DT chileno y con Brasil sacándose la rabia de ser criticados hasta por su propio presidente, dejando escrito en la pizarra del camarín del estadio: "Hay que respetar a la mejor selección del mundo".

Nueva Estación

Empezó la primavera. Aunque en teoría, comienza el 21 de este mes, pero ya está empezando. Florecieron los árboles que están por fuera de mi casa. Y eso no deja de ser. Por mientras, un resumen de los eventos más importantes en los últimos 8 días:

Miércoles y sábado pasado: Fui a ver al eterno Colo-Colo al estadio Monumental por primera vez. El primer partido fue contra la Unión Española y el segundo contra Santiago Morning. Ambos partidos finalizaron 2-1 favor al cacique. La gran diferencia fue que contra la Unión era el último partido del D.T. Fernando Astengo y después asumiría Marcelo Barticcioto (el Barti). Astengo se había ganado el odio de la hinchada popular tras la final perdida en el Apertura contra el Everton, dado que el equipo jugó de una manera ultra defensiva y no salió a buscar el gol de la estocada final. Además nunca convenció con su controvertido sistema 4-2-2-2. En la otra cara de la moneda, el Barti es ídolo dentro de la historia del Popular, le gusta jugar a la ofensiva, por lo tanto contará con el respaldo de la gente.

Lunes: Vi la película que hace mucho tiempo quería ver: Muerte en un funeral (Death At A Funeral). Me reí demasiado durante el 90% de la película. Se trata más que nada de la muerte de un patriarca y su respectivo funeral, con una serie de acontecimientos chistosamente absurdos. Uno de los mejores detalles son las caras de impacto que van poniendo los personajes frente a las determinadas situaciones.

Martes: Se filtró finalmente el disco Death Magnetic de Metallica en la red. A pesar de que no les tenía fe y los daba por muertos, me ha dejado con más de una sorpresa. No puedo parar de escucharlo, sobretodo canciones como "All Nightmare Long" y "The Unforgiven III". Supongo que hice el mejor truco: No tener expectativas de la situación y me llevé una buena sorpresa. El disco tiene muchos elementos de los discos clásicos (los 4 primeros), volvieron las canciones rápidas y largas. Se podría pensar que esta no fue una movida honesta de parte de la banda: obligarse a volver a la vieja escuela para reencantar a los fans que estaban más desilucionados con la agrupación. Pero en el fondo, era lo que todos querían que sucediera. Creo que me lo voy a comprar igual para tenerlo. Y ojalá no haya que esperar otros 5 años más para un nuevo disco. Aunque en realidad, da lo mismo, porque Megadeth en 1 o 2 años sacará un nuevo disco y Megadeth es lo más grande que hay.

También finalizó la teleserie nocturna "El Señor de la Querencia". Trataba (para el que no sepa) de un patrón de fundo chileno cruel, despiadado e implacable con sus enemigos, ambientado en los años 20 más o menos. El tipo progresivamente va enloqueciendo y se va en una volada religiosa muy distorcionada. Nunca había visto un tipo tan malvado en la televisión abierta. Finalizando el tema, el tipo en este último capítulo hizo de todo, no dejó titere sin cabeza, se pasó…

Miércoles: Hoy tuve el agrado de ver a Tarja Turunen, la ex cantante de Nightwish en solitario, en el teatro Caupolicán. Estuvo muy entretenido el concierto, estaba en cancha muy agradable todo. La espera fue eterna eso si, tuve que escuchar obligadamente a los teloneros (Six Magics y Husar) que no son precisamente lo que yo busco en la música. Más encima uno de los cantantes era el tipo que vende discos en la Knife (antes en la Under parece que también). El tipo es bien pesado para vender discos y por si fuera poco te mira con cara de "eres un estúpido", entonces lo aplaudí bien de mala gana, por respeto solamente. Además fue el fantasma en la interpretación de "The Phantom Of The Opera" con Tarja. El recital, muy bueno, hartas canciones… la Tarja se pasó, es hermosa y canta bien. Ojalá se repita, además este año han habido muchos recitales, como el de Megadeth, entre otros.

Eso sería todo por hoy, muchas gracias.

Eurotour (5): Año Nuevo's Edition

Día 5 (31-12-02): “San Silvestre”

Y llegó el anunciado día. Un día que permanecerá en la memoria de todos aquellos que estuvieron ahí. Lo que pasó en este día, sin duda, vale por 1 mes. Nos despertamos algo atrasados. Desayuné rápidamente la comida que nos habían dejado anoche, pero aún así sabíamos que nos iban a atajar para el desayuno y no podríamos rechazarlo. Así desayunamos bien y nos apuramos para llegar a tiempo a la estación. Recuerdo que la Sra. Ana María hizo el comentario de que nos sintió llegar y de ahí Peich me retó por meter bulla en la noche. Quizás tenga razón, en mi casa siempre me retan por ir al baño de noche.
Llegamos 10 minutos tarde a la estación. Esperamos un buen rato, la gente siempre suele llegar tarde, o por último nos habrían esperado. Lástima, porque siempre uno debe esperar y cuando lo tienen que esperar a uno no lo hacen. Finalmente fuimos solos al Berlin Zoologischer Garten, donde supuestamente estarían todos. Al llegar nos encontramos con Mario y subimos los 3 por unas escaleras mecánicas. Arriba estaban todos. Habían llegado Chofa y Karin, también estaban “Maru”, “Cata Ugarte” y el Barmin, que rápidamente se retiró. Brillantín estaba rubio (o decolorado) y parecía futbolista japonés. Regresamos al albergue para hacer el “Check-In” de las niñas. En ese momento nos separamos en 2 grupos: Los del curso “A” y los del “B” (del B eran Wilhelm, que a veces se unía más a nosotros, Catherine, Maru y Cata Ugarte, para no nombrarlos a todos). Algo que se venía venir. Recuerdo perfectamente el sufrimiento de Volantín (Benjamín) quejándose cuando llegaron las del B. Al terminar el Check-In los del A quedamos esperando a los del B, quienes habían ido a comprar víveres para sobrevivir a la noche. Aburridos de esperar, salimos a sacar fotos al Brandenburger Tor. Yo no tenía ganas, pero era justo y necesario, además tenía ganas de visitar otra cosa, pero se suponía que hoy iba a estar todo cerrado. En la estación de Kürfunsterstraße, sucedió el primer evento “heavy” de la jornada. Nos subimos al vagón y partió el tren. De pronto, un tipo que iba tranquilamente parado se sacó de la camisa un carné y gritó: “Kontrolle”. Era un inspector disfrazado de civil. Nos pidió los tickets, que obviamente teníamos, pero los incorrectos. Resultó que habíamos comprado los del día completo, pero para los “Ermäßigung”. Un “Ermäßigung” es quien paga menos, ya sea por discapacidad o tener menos de 13 años. El inspector me pregunto mi edad y yo dije casi por inercia 16 aunque tenía 17 en el momento. No sirvió porque era para 13 el asunto. Finalmente el sujeto nos hizo bajarnos a todos, ya que todos tenían los tickets malos. Lo chistoso que el inspector le echó 13 años a Mario y Carole. Ni Benjamín se salvó, puesto que su boleto semanal había sido validado más de una vez, hacíendolo inválido. En eso, llegaron los amigos del inspector. Eran todos unos gigantones. Como dato curioso, creían que éramos italianos (confusión que pasaría más de alguna vez en todo el viaje por Alemania) y se sorprendieron al enterarse que veníamos de Chile. Finalmente nos explicó que debíamos pagar una multa de 30 Teuro (ese fue el nombre nuevo que me enseñó Mario). Lo satánico fue que el tipo nos contró uno por uno, sumando el dinero: 30, 60, 90… 180€. Afortunadamente, las chiquillas haciendo uso de la piedad, les explicaron que nosotros no sabíamos y que era nuestra primera vez en Alemania. Los sujetos no eran tan crueles después de todo y se les ablandó el corazón, llevándonos a la máquina para que compráramos nuestros nuevos boletos. Incluso nos recomentaran que compráramos un Gruppenkarte, es decir, tarjetas para grupo. Después nos despedimos y tomamos el metro hasta Postdamer Platz.

Hoy si que sí estaba infectado de gente el B. Tor. Ya se podía ver que estaban terminando de instalar la maquinaria para el año nuevo. Habían incluso sacado el árbol gigante de navidad. Era fácil perderse, porque de pronto nos quedamos solos Cervatín, Javier y yo. Aprovechamos de comprar unas Bratwurst para el frío que estaba más fuerte que nunca. Estaban ricas, para el precio, pero la mostaza europea era asquerosamente picante. Los alemanes no eran tan perfectos después de todo. Al final nos encontramos con el grupo y fuimos a fotografiar el Reichstag. El “patio” estaba ahora congelado por el frío, incluso se podía patinar. Ya el frío era brutal, así que nos decidimos seguir moviendo. Ya de nuevo en el B. Tor nos volvimos a separar, quedando Vilaboa, Page y yo. Aburridos de esperar, nos fuimos solos al Alexanderplatz. No había mucho que mirar en realidad. Al menos le sacaron una foto al Fernseh Turf, lástima que estaba cerrado y no pudimos subir. Fotografiamos una capilla y otras cosas. Ya estaba oscureciendo y volvimos al albergue. Ahí nos encontramos con los chiquillos quienes nos estaban esperando. Ahí decidimos salir de nuevo a Alexander Platz, pero sin la Chofa y Karin que no habían dormido nada y se quedaron descansando.
En la estación Kürfunsterstraße nos subimos al vagón del tren y al cerrarse nos percatamos de algo: Filósofo se había quedado afuera poniendo una cara de estupefacto. Nunca supimos por qué, la cosa es que simplemente no reaccionó y no se subió. Nos tuvimos que bajar en la siguiente estación para esperar la aparición de este cabro que no llegó nunca. Con Javier fuimos caminando a la estación donde Benjamín se había quedado (ya no andaban trenes de vuelta) y no estaba. Cuando volvimos hacia donde nos esperaba el resto decidimos regresar al albergue. Ahí nos reunimos con los del B y nos quedamos en una habitación comiendo y tomando. Al rato regresó Mirri y nos quedamos conversando. Mientras las mujeres del A se arreglaban, las del B conversaban acerca de unos temas que terminaron traumatizando a Mercantil y provocaron su retirada. Ya estábamos listos para salir tras haber hecho el precalentamiento correspondiente. Con Mario nos tomamos un nuevo brebaje en ese momento: Red Bull. Aquí en Chile en ese tiempo recién estaban entrando en circulación los tragos energéticos, cargados de cafeína y taurina. Me tomé el trago a medias con Mario y me sentí muy feliz, pero en ningún momento el poder de la bebida. También nos fijamos que acá se podía tomar alcohol en la calle, así feliz de la vida. Wilemiun también me convidó de su Red Bull mezclado con ron, que según él daba más energía.
A todo esto, la calle era un infierno. ¡Los alemanes están locos! Todo el mundo andaba lanzando cohetes como enfermos. Acá es ilegal el uso de los fuegos artificiales, aunque claro, porque de vez en cuando sale el caso del niño que se quemó por estar jugando. Y como ninguno de nosotros estaba acostumbrado, nos daba miedo que nos llegara alguno. Y con mayor razón: Había un grupo de enfermos que nos lanzó un par. De hecho se reventó uno casi al frente mío. Me llegaron a doler los oídos. Incluso a una de las chiquillas le saltaron chispas a la cara. Al llegar al Postdamer Platz, el Vilaboa nos hizo esperar, que se iba a reunir con alguien. Y como nunca llegó seguimos nuestro camino. Era todo un despelote, lleno de basura (algo que uno no se imagina en un país primermundista), policías y ambulancias. A la entrada estaban revisando y como llevábamos champaña, no nos dejaron entrar. Buscamos entrar por otra parte, pero no se podía. Así que hubo una gran discusión, puesto que Maru y Cata (que no tomaban) decían que dejáramos el copete, y el resto, que lo tomáramos ahora o guardarlo. Después de un par de roces lo terminamos guardando en unas ventanas de la cercanía.
Ya adentro, se sentía el poder de la fiesta. Todos los alemanes “partuseando”. Queríamos llegar bien adelante y poder ver mejor el show en vivo. Y a alguien se le ocurrió la buena idea de hacer un trencito y nos abrimos el paso hacìa adelante. Después llegamos lo más adelante que se podía y disfrutamos del show en vivo que en realidad era puro playback. Me acuerdo que después pasaron unos alemanes gritando “Oye Chofa” y que de paso parece que le corrieron mano. Me acuerdo que ahí probé por primera vez tabaco. Le pedí un poco de cigarro a Filósofo y listo. No tenía mal sabor y ahí entendí por qué era fácil hacerse adicto.
Después empezaron con un clásico: The Final Countdown. Al finalizar la cuenta regresiva, había terminado el 2002 dando paso a un nuevo período.

«Feliz año.»